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30 de mayo de 2013 -
El 2 de junio de cada año se celebra la
Fiesta de la República Italiana, para
recordar el referéndum de 1946 que, después
de la Segunda Guerra Mundial, marcó el fin
de la monarquía y el nacimiento de la forma
del Estado aún vigente en Italia. En 1977
—con la ley número 54 de 5 de marzo y debido
a la complicada situación económica— la
celebración se cambió para el primer domingo
de junio, pero fue reintroducida en 2001 con
la ley número 336 de 20 de noviembre de
2000.
En este día se organiza el tradicional
desfile en la Vía de los Foros Imperiales en
Roma. El protocolo de la celebración prevé
la colocación de una ofrenda floral al
Soldado Desconocido en el Altar de la
Patria, seguida por el desfile militar, al
que asisten los más altos cargos del Estado.
2 de junio de 2012. Roma. La ofrenda en el
Altar de la Patria.
Participan en el desfile las Fuerzas
Armadas, la Policía de la República, el
Cuerpo Nacional de Bomberos, el Cuerpo
Nacional de la Cruz Roja Italiana y algunas
delegaciones militares de la ONU, de la OTAN
y de la Unión Europea.
Por la tarde, se abren al público los
jardines del Palacio del Quirinal, donde se
presentan las bandas del Ejército italiano,
de la Armada, de la Fuerza Aérea, de los
Carabineros, de la Policía, de la Guardia de
Finanzas, del Cuerpo de la Policía de
Reclusorios y del Cuerpo Forestal.
2 de junio de 2012. Roma. Desfila la Cruz
Roja.
Hasta 1946 Italia era una monarquía
constitucional, regida por el Estatuto
Albertino. El 2 y 3 de junio de ese mismo
año se llevó a cabo el referéndum
institucional celebrado con base en el
principio del sufragio universal y todos los
italianos —incluyendo a las mujeres, quienes
votaban por primera vez— fueron llamados a
las urnas para elegir la forma de gobierno
preferida entre monarquía y república.
Con 12,718,019 votos contra 10,709,423, los
votantes eligieron la república y la familia
Saboya —hasta entonces al mando de la
monarquía— fue exiliada.
La primera plana
del Corriere della Sera del 6 de junio de
1946.
El mismo día del referéndum, los votantes
eligieron también a los miembros de la
Asamblea Constituyente, a la cual se
encomendó la tarea de redactar la nueva
constitución.
Los votantes de ese día fueron 24,947,187,
el 89% de las personas con derecho a voto.
El porcentaje de votos a favor de la
República fue de 54.3%, mientras que el
porcentaje a favor de la monarquía fue del
45.7%. Pero Italia se dividió en dos: en el
norte ganó la república con un 66.2% de los
votos, mientras que en el sur las
preferencias favorecieron a la monarquía con
el 63.8% de los sufragios
En julio de 1943, Víctor Manuel III había
ordenado la detención de Mussolini, dejando
al mariscal Pietro Badoglio a cargo del
gobierno. Después del armisticio del 8 de
septiembre del mismo año, Italia se sumió en
el caos y el rey huyó hacia el sur de
Italia. En este clima difícil, se comenzó a
esbozar la idea de un cambio radical en la
forma de gobierno del país. La monarquía y
Víctor Manuel III eran considerados los
principales responsables de la situación de
ese momento, por apoyar al fascismo y
permitir la entrada en guerra.
En 1944, Togliatti propuso esperar el final
del conflicto para discutir la cuestión
institucional, encontrando un acuerdo entre
los distintos partidos según el cual Víctor
Manuel III fue relevado de sus funciones y
su poder pasó temporalmente a Umberto de
Saboya, príncipe de Piamonte y heredero al
trono.
La decisión de posponer cualquier decisión
hasta el final de la guerra se hizo oficial
con el decreto No. 151 del 25 de junio de
1944 en el cual se establecía que, en tiempo
de paz, se convocaría un consulta popular
para elegir la forma de estado así como una
asamblea constituyente.
El 31 de enero de 1945 el Consejo de
Ministros emitió un decreto que reconocía el
derecho de voto a las mujeres y el 16 de
marzo de 1946 el Príncipe Umberto decretó
oficialmente la organización de un
referéndum para decidir la forma
institucional del Estado. Un mes antes del
referéndum, Víctor Manuel III abdicó en
favor de Umberto II, con la esperanza de que
ese gesto obtuviera suficiente aprobación
popular como para asegurar la continuidad de
la monarquía.
El 10 de junio 1946 por la noche se dieron a
conocer los resultados del referéndum, pero
la proclamación de la República fue aplazada
al 18 de junio para dar trámite a las
diversas protestas, sobre todo en relación
con el bajo margen de votos a favor de la
república. El 18 de junio, la Corte Suprema
confirmó la victoria de la República.
(barbara leone / studenti.it / puntodincontro.mx / adaptación y traducción
al español de
massimo barzizza)
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