30
de abril de 2013
-
¿Santa popular o secta satánica? ¿Virgen de
los narcos o protectora de los más débiles?
Dos, quizás 5 o 10 millones son los devotos
de uno de los cultos que más preocupan a la
Iglesia en América. De México a Estados
Unidos y Argentina, una santa controvertida
está sumando adeptos, tras siglos de
clandestinidad. De santa border line
a ícono global gracias al world wide web,
la Muerte mexicana toma hoy diferentes
formas y se integra con las subculturas
juveniles y el imaginario del narcotráfico.
Cuando la muerte se hace presente en la
sociedad, estremecida por años de guerra a
los cárteles y entre cárteles, su culto
regresa de entre las sombras. Traída de
Europa con la conquista, contaminada por
tradiciones afro antillanas como la santería
y por la posmodernidad de los barrios
marginales de la Ciudad de México, la muerte
santificada es folclor, cultura, religión,
vida de barrio y totalmente mexicana. Es
temida y amada, vendida y hostigada, pero
sigue siendo una realidad inevitable para
todos. Y, en México, ya es santa.
El libro
Santa Muerte, patrona de la humanidad—que
incluye una introducción del escritor
italiano Valerio Evangelisti y un anexo
fotográfico a colores—
se encuentra
en venta en
la
Libreria Morgana de la Ciudad de México,
en
ibs.it, Amazon y las principales
librerías virtuales de Italia.
Su autor, Fabrizio Lorusso, nació en en
Milán en 1977 y reside en México desde hace
12 años. Periodista, escritor y blogger,
Lorusso es también corresponsal del
periódico italiano L'Unità para
América Latina, colaborador y editor de
otras publicaciones online e impresas y
profesor de lengua y cultura italiana.