27 de abril
de 2014 -
Es el día de los cuatro Papas, un
acontecimiento único en la historia del
cristianismo. Papa Francisco celebra la misa
de canonización de Juan Pablo II y de Juan
XXIII en San Pedro. Dos papas se convierten
en santos y otros dos se encuentran en la
plaza: el Papa emérito aceptó la invitación
para concelebrar la Misa y lleva puestas
mitra y casulla blancas.
Antes de iniciar, Francisco quiso abrazar a
su predecesor Joseph Ratzinger, provocando
emoción entre los presentes. La Via della
Conciliazione y la Plaza de San Pedro están
repletas de peregrinos, la multitud desborda
y a lo largo del río Tíber las calles están
llenas de fieles, turistas, visitantes y
curiosos.
Miles de personas bajo un cielo gris y
algunas gotas de lluvia, cantando y rezando,
están tratando de llegar a la Plaza de San
Pedro. El ambiente es tranquilo y pacífico.