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20 de febrero de 2016 - Ferrari presentó ayer su nuevo SF16-H, el monoplaza de la escudería italiana para el campeonato mundial 2016 de Fórmula Uno —cuya etapa mexicana tendrá lugar el 30 de octubre— que fue definido por el director deportivo Maurizio Arrivabene como «más que un simple auto de carreras».

El coche, que tratará de alcanzar a los Mercedes —y posiblemente algo más que eso, con el fin de arrebatarles el campeonato mundial— fue descrito en cinco puntos por Simone Resta, diseñador en jefe, y Mattia Binotto, coordinador de los ingenieros de la unidad de potencia. «En comparación con el año pasado —dijo Resta— tuvimos que alcanzar estándares más elevados. Por lo tanto, fue necesario modificar casi todo». El monoplaza fue revisado en su totalidad: para una gran batalla son necesarias grandes decisiones. Estas son las principales novedades.

Nariz corta

La sección delantera es más corta, al estilo Toro Rosso, y además fue levantada para mejorar los flujos aerodinámicos que deben deslizarse hacia la parte trasera. No es cierto, de hecho, que el reto en contra de los Mercedes se limite a temas relacionados con la unidad de potencia.

Suspensión de varilla de empuje

Después de cuatro años, Ferrari vuelve a la tradición: la suspensión delantera ya no estará basada en barras de tracción, que crean ventajas aerodinámicas, pero también inconvenientes en el manejo (Kimi Raikkonen, en particular, no extrañará la versión anterior) sino nuevamente en varillas de empuje. Su diseño y su geometría fueron modificados para garantizar, precisamente, una excelente facilidad de conducción.

Costados y enfriamiento

Simone Resta y su equipo perfeccionaron los costados con particular énfasis en las entradas que deberán capturar el aire para el enfriamiento: el objetivo era mejorar la eficiencia de este proceso vital.

Unidad de potencia revisada

Mattia Binotto hizo hincapié en las dos líneas de acción que se siguieron para lograr un motor, como mínimo, a la par con el de Mercedes: «La atención se centró en el espacio y en la arquitectura». Los motoristas trabajaron más que nunca en sinergia con los encargados de la aerodinámica: fueron reubicados varios accesorios para reducir las dimensiones globales.

Sección trasera rediseñada

La búsqueda de una carga aerodinámica óptima siempre es decisiva para el éxito de un coche de Fórmula Uno. El adjetivo con el que fue bautizado el paquete del eje trasero fue “esbelto”. La pista dirá si se alcanzó el nivel deseado de adherencia.

Sebastian Vettel está ansioso por llevar a la pista el nuevo monoplaza, que definió como “el primer verdadero coche de este equipo”. «Desde el exterior se puede ver que tiene un diseño diferente» —dijo el piloto alemán— «su aspecto es hermoso con el blanco y mi casco seguirá ese mismo tema. Fue agradable ver en los últimos días las cosas tomar forma en la fábrica».

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(massimo barzizza / puntodincontro.mx)