21 de agosto
de 2013 -
La cerveza se vuelve más portátil. Pat’s
Backcountry Beverages, fabricante de
bebidas, creó un concentrado de cerveza que
potencialmente evitaría la molestia de
cargar el peso de seis, doce o más unidades
en su empaque de aluminio o vidrio.
La empresa con sede en Talkeetna (Alaska)
empezará a vender el producto el otro mes en
sobres de 41 mililitros (ml) capaces de
volver 473 ml de agua en una cerveza de 5,2
grados de alcohol. Cuatro sobres valdrán
$9,95.
La propuesta podría cultivar adeptos por
ahorro y cuido del ambiente pues, al
eliminarse el transporte del producto ya
elaborado, baja el consumo de combustibles
fósiles, la generación de basura y el costo
para el cliente de trasladar, en esencia,
agua.
La cervecería afirma que su concentrado no
es cerveza deshidratada. En vez de elaborar
cerveza y luego quitarle el agua como otros
métodos, este sigue otra ruta pues, al
evaporar el agua, también se va el lúpulo
que al final es el que impone el sabor.
El sistema de Patrick Tatera, dueño de la
compañía, se inicia como cualquier
elaboración de cerveza “pero casi sin agua”
, según la información oficial.
Tatera explicó a la revista
Popular Science que primero hierve agua y
malta para crear mosto (cerveza sin
fermentar) y, enfriada la mezcla, añade
levadura necesaria para la fermentación.
La mezcla después se destila al vacío y se
guarda el etanol resultante. Lo que queda
entonces es un jarabe. Entonces se inicia el
proceso de nuevo, pero usando el jarabe en
vez de agua.
Se fermenta otra vez la mezcla, se retira el
etanol nuevamente, y se repite de nuevo el
procedimiento. Cada lote de concentrado
recibe cuatro veces este tratamiento.
Concluida la última ronda, se empapa el
lúpulo con el alcohol reservado y después
ese lúpulo se añade al jarabe. El producto
final es un concentrado con 10 veces la
fuerza de una cerveza promedio, reseña el
texto de Popular Science.
«Si entras
a nuestras instalaciones, verás
fermentadores, una contenedor de maceración, una
caldera de cerveza y también un poco de
equipo que se parece a una película de
ciencia ficción, y ahí es donde nuestra
tecnología muy especializada nos permite
hacer lo que hacemos», explica Tatera.
Pero hay truco. Para poder preparar la
cerveza, se debe usar una botella de
plástico llamada Carbonator , distribuida
por la empresa.
En el recipiente a presión (cuesta $29,95)
el agua se convierte en una bebida
carbonatada con una solución de bicarbonato
de potasio y el mecanismo del Carbonator.
Para preparar la cerveza instantánea, se
agrega al agua un sobre de concentrado de
cerveza y otro para gasificarla dentro del
mismo recipiente. «El gas de la cerveza se
obtiene del contenido de los sobres. Es una
mezcla de bicarbonato de potasio y ácido
cítrico que, al agregar agua y agitar,
produce burbujas de dióxido de carbono»,
detalló Tatera.
La página Facebook de la empresa anuncia
que a mediados de setiembre empezará a
distribuir los primeros dos sabores: la
black IPA y la Pale Rail.
(nacion.com / puntodincontro.mx /
adaptación y traducción al
italiano de
massimo barzizza)
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