06:20 hrs. – Italia ha jugado un papel esencial en la historia de los bares, diferenciándose de otras naciones al crear una tradición que con el tiempo se ha vuelto típicamente representativa de la cultura del Bel Paese.

En la península de la bota, el término "bar" indica un lugar con una oferta muy amplia, en el que se sirven y consumen principalmente café y capuchinos, así como alimentos dulces y salados.

Es importante subrayar que los gustos salados están ausentes del concepto de desayuno italiano, que en un bar se realiza acompañando café o capuchino con croissants y otros pasteles, mientras que para el almuerzo o el aperitivo de la noche estos lugares ofrecen sándwiches y pizzas, junto con bebidas tanto alcohólicas como no alcohólicas.

Un bar también puede contar con instalaciones para consumir, adentro o afuera, y es considerado en la cultura italiana como uno de los principales puntos de reunión, para encuentros y entretenimiento, especialmente durante el día y la tarde.

El “bar italiano” es de hecho un lugar para leer el periódico, ver deportes en la televisión (Bar-Sport), charlar con amigos o jugar cartas. A veces tiene la función comercial de tabaquería (Bar-Tabaccheria).

El bar es uno de los símbolos de Italia, asociado al placer de la población de disfrutar de un café a cualquier hora del día o de un aperitivo al atardecer y es, sin duda, la tipología de local que mejor representa a los habitantes del país de la bota en el mundo.

También en el extranjero hay bares de estilo italiano, pero en los países de habla española, inglesa y alemana, el equivalente está más o menos asociado con el término cafetería o café.

No es casualidad que Howard Schultz, fundador de Starbucks, en su primer viaje a Milán, en 1983, haya quedado fascinado e inspirado no solo por la cultura del espresso, sino sobre todo por el ambiente, el sentido de comunidad y el contacto humano entre “baristas” y clientes que encontró en los bares italianos. Fue precisamente esto lo que lo inspiró para luego llevar Starbucks a todo el mundo.

Los efectos del covid

En los últimos dos años, casi 7,000 bares han cerrado sus puertas en Italia a causa del Covid.

Los datos, difundidos por Unioncamere e InfoCamere a partir de información del Registro Mercantil, muestran que de los 169,839 bares existentes al cierre de 2019, a finales de 2021 quedaban 162,964, es decir, 6,875 menos (-4.05%).

Una fuerte reducción, que afecto en primer lugar a la Región del Lacio, donde estos locales públicos disminuyeron 10.09%, lo que equivale a 1,860 establecimientos menos. Le sigue el Valle de Aosta, que marca una variación porcentual del -9.7% y un descenso numérico de 51 bares.