23:01 hrs. - A partir del 1º de enero de 2023 —como resultado del decreto firmado por el ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti— se aplicará la revalorización de las pensiones con lo que los cheques se indexarán a la tendencia inflacionaria de 2022.

El ajuste será del 7.3%, pero sólo se beneficiarán íntegramente los titulares de tratamientos que no superen los 2,101.52 euros mensuales, correspondientes a 4 veces el mínimo del INPS, que es de 525.38 euros.

Los incrementos irán desde aproximadamente 38 euros mensuales para las pensiones mínimas hasta los 52 euros netos para las de mil euros. Para montos de 2,000 euros brutos el aumento será de 100 euros y los cheques de 4,000 euros brutos aumentarán en 150 € netos.

El cálculo se realizó provisionalmente en base a la variación porcentual que se produjo en los índices de precios al consumidor proporcionados por el ISTAT el 3 de noviembre de 2022. Pero existe la posibilidad de que la proyección para los meses de noviembre y diciembre esté por debajo del dato real a finales de año. Por lo tanto, la revalorización podría ser aún mayor. En este caso, los pensionistas recibirán un ajuste el próximo año, como ya sucedió en 2022.

También en 2023, el esquema de indexación de pensiones será el adoptado este año. El ajuste será íntegro (100%) para los cheques no superiores a 4 veces el mínimo INPS, fijado en 525.38 euros; bajará al 90% para tratamientos entre 4 y 5 veces el mínimo y al 75% para pensiones por encima del umbral de 5 veces el mínimo. La revalorización se aplicará sobre los importes brutos de los cheques, incluyendo el ajuste de 0.2% pagado a principios de noviembre de este año.

Considerando el esquema de indexación vigente, los cheques equivalentes al mínimo INPS (525 euros) se beneficiarán de un incremento mensual de 38 euros netos. El aumento ascenderá a 52 euros para tratamientos de mil euros brutos al mes. Evidentemente, será aún más fuerte la revalorización para las pensiones de 1,500 euros brutos, que debería ser de 110 euros brutos (75 euros netos), y para las de 2 mil euros (con un ajuste de 146 euros brutos correspondientes a 100 euros netos). Yendo más arriba, un tratamiento de 2,500 euros brutos debería reforzarse cada mes con otros 180 euros brutos, que pasan a ser 111 netos, mientras que una pensión de 4 mil euros debería revalorizarse por encima de los 260 euros brutos, que serían 150 euros netos al mes.