18:04 hrs. – Hoy abrió al público Leche del sueño, título de la 59 Bienal de Arte de Venecia, tomado de un libro de cuentos de la artista surrealista anglo-mexicana Leonora Carrington.
Fundado en 1895 como una muestra internacional, el evento reúne lo mejor de las expresiones contemporáneas a través de exposiciones e investigaciones de todas las disciplinas: artes visuales, arquitectura, cine, danza, música y teatro.
En total, 58 países participan en el encuentro con un pabellón representativo y México es uno de ellos. La primera participación en la Bienal de la única nación latina de Norteamérica fue en 1950 con las obras de los muralistas David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco, Diego Rivera y Rufino Tamayo.
Este año, el país latinoamericano presenta el proyecto Hasta que los cantos broten, que —bajo la curaduría de Catalina Lozano y Mauricio Marcin— reúne las creaciones de cuatro artistas de distintas generaciones: Mariana Castillo Deball, Naomi Rincón Gallardo, Fernando Palma Rodríguez y Santiago Borja. El título, tomado de un poema de Temilotzin —defensor de Tenochtitlan y amigo de Cuauhtémoc— evoca la persistencia de las luchas ppara defender un futuro libre de paradigmas hegemónicos.
«Las propuestas que se presentan en Venecia» —se lee en un boletín del Istituto Nacional de Bellas Artes (Inbal)— «abordan formas de conocimiento que no han sido completamente colonizadas por la episteme moderna y que han sobrevivido y florecido a través de la resistencia de la afirmación de modos de vida que se manifiestan al margen de la visión antropocéntrica moderna, modelada por el principio unívoco de progreso».
En la inauguración estuvieron presentes también la coordinadora nacional de Artes Visuales del Inbal, Mariana Munguía Matute, y el agregado cultural de la Embajada de México en Italia, Héctor Alcántara Palacios.
Desde 2014, el Pabellón de México ocupa uno de los lugares más emblemáticos de La Serenissima: el Arsenal.