04:22 hrs. - Ferragosto es un día festivo que se celebra el 15 de agosto en toda Italia, en San Marino y en Suiza en el Cantón de Ticino. El término también indica metonímicamente el período de las vacaciones de verano en torno a este día, que puede ser un fin de semana largo (puente de mediados de agosto) o la mayor parte del mes.

Feriae Augusti . Esta es la expresión latina, que literalmente significa “descanso de Augusto”, de la cual deriva la palabra Ferragosto y la costumbre de un día de suspensión total de las actividades laborales.

La festividad fue introducida en el año 18 a.C. por el emperador romano Augusto como corolario de otras solemnidades de la época, como la Vinalia rustica —recurrencia en honor a Venus—, la Nemoralia —fiesta en honor de la diosa Diana— o la Consualia, una conmemoración dedicada al dios Conso. Esta última, en particular, era una celebración dedicada al final de las labores agrícolas, que se hacían cada vez más intensas antes del verano.

El Ferragosto en la antigua Roma caía, como quiso Augusto, el primer día del mes. Comenzó a celebrarse el día 15 hacia el siglo VII, cuando la Iglesia Católica, “tomando prestada” la fiesta pagana, lo trasladó a coincidir con la celebración de la Asunción de María.

Sin embargo, Ferragosto, tal y como lo conocemos hoy, no tiene orígenes tan antiguos. Si en la época del Imperio Romano y el surgimiento de la Iglesia Católica se consideraba sólo un día de descanso, fue durante la época fascista cuando se transformó el concepto.

A partir de la segunda mitad de la década de 1920, hacia mediados del octavo mes del año, las asociaciones que se encargaban de las actividades recreativas para los distintos gremios comenzaron a organizar viajes populares. De 1931 a 1939 la costumbre se vio reforzada por la institución de trenes populares especiales, inicialmente sólo de 3ª clase, con precios muy rebajados.

La iniciativa ofreció la posibilidad a las clases sociales menos acomodadas de visitar las ciudades, llegar a las playas o a la montaña. La oferta estaba limitada a los días 13, 14 y 15 de agosto e incluía dos fórmulas, el “Viaje de un día”, en un radio de hasta 100 km, y el “Viaje de tres días” con un radio de hasta 200 km.

Gracias a estas excursiones, muchas familias italianas tuvieron por primera vez la oportunidad de ver el mar, las montañas y las ciudades de arte. Dado que los alimentos no estaban incluidos, también nació la tradición de los almuerzos para llevar.