04:38 hrs. - El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) deberá limitar el número de operaciones (despegues y aterrizajes) por hora a un máximo de 43 a partir de la tarde del 28 de octubre. La medida fue anunciada ayer por la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) debido a la saturación del aeródromo, que ha provocado que se sobrepase la capacidad de los edificios terminales de pasajeros.
Por lo tanto, el aeropuerto más transitado de América Latina tendrá que reducir 9 vuelos por hora de los 52 actuales.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo en su conferencia de prensa matutina del jueves 31 de agosto que las aerolíneas han sido consultadas. Pero la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) afirma haber rechazado y cuestionado la decisión «unilateral» del gobierno.
«Esta medida no tiene en cuenta los intereses de los consumidores, ni respeta el necesario proceso de consulta con operadores y usuarios, especialmente en el principal aeropuerto del país», dijo en un comunicado Peter Cerda, vicepresidente regional de IATA.
El Grupo Aeroméxico, propietario y operador de la principal aerolínea del país, emitió un comunicado señalando que la reducción de operaciones afectará a los pasajeros, a los trabajadores del sector y a la atracción de nuevas inversiones, que dependen de la seguridad jurídica y de una adecuada conectividad aérea.
La compañía, se lee en el texto, «está a la espera de conocer cómo será implementada esta nueva reducción y continúa analizando sus alcances y efectos» y reiteró su compromiso de seguir contribuyendo para que México pueda contar con un sector de aviación de clase mundial.
El grupo industrial de transporte aéreo Canaero declaró en un comunicado que el aeropuerto tiene capacidad para atender 61 vuelos por hora y que las nuevas disposiciones provocarán una «cancelación masiva» de 1,000 vuelos semanales a partir del 29 de octubre.
El decreto exige que las reducciones se produzcan en la temporada de invierno, que la IATA define como el período comprendido entre el último domingo de octubre y el último sábado de marzo.
Los recortes se suman a los anteriores límites de vuelos impuestos al aeropuerto el año pasado, en un intento por parte del gobierno de reducir la saturación del espacio aéreo de la capital mexicana y desviar el tráfico hacia el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
Imágenes: AICM-eleconomista.com.mx