01:59 hrs. - Ferrari llega al Gran Premio de México —previsto para el próximo fin de semana— con el sabor agridulce del podio de Sainz en Austin, pero también de la descalificación de Leclerc.
«Salimos de Austin con una clasificación revisada tras la exclusión de Lewis Hamilton y Charles, lo que permitió a Carlos subir al podio. Es un resultado que se merece por la forma en la que administró la carrera y que nos permitió volver a ganar puntos en la lucha por la segunda plaza en la clasificación de constructores. En México, sin embargo, quiero ver más concentración por parte del equipo, porque ya no podemos permitirnos algunos de los errores de juicio que vimos en Estados Unidos», dijo el líder del equipo y gerente general Frederic Vasseur.
«Lo que nos espera es una carrera muy particular, en la que unas condiciones ambientales únicas influyen en el rendimiento de los coches, tanto en términos de prestaciones puras como de gestión de neumáticos. Teniendo el formato de carrera tradicional, tendremos la oportunidad de hacer todas las evaluaciones necesarias en las tres sesiones de entrenamientos libres y estoy convencido de que desarrollaremos estrategias específicas que nos permitirán aprovechar al máximo un Gran Premio que sobre el papel promete ser bastante complicado. Todos nosotros, empezando por Carlos y Charles, debemos ser capaces de aprovechar cada oportunidad que se presente», añadió.
La característica peculiar del autódromo Hermanos Rodríguez es la rarefacción del aire, un fenómeno debido a la altitud —2,240 metros sobre el nivel del mar— que hace necesaria una configuración de carga máxima, similar a la que se exige en el mucho más lento y tortuoso circuito de Montecarlo. Sin embargo, la baja densidad del aire reduce la resistencia aerodinámica y permite alcanzar velocidades especialmente altas en línea recta: no es casualidad que aquí se alcanzaran 372.5 km/h, un récord para un coche de Fórmula 1.
Foto: ferrari.com