04:14 hrs. - El Comité de Presidencia del Consejo General de los Italianos en el Extranjero (CGIE) quedó «atónito» y tal vez incluso preocupado tras la reunión de ayer por la tarde con Luigi Maria Vignali, director general para los Italianos en el Extranjero de la Cancillería, donde se discutió principalmente sobre finanzas públicas, recortes y representación de los italianos en el extranjero.
Preocupado sobre todo porque, a la luz de la nueva Ley de Presupuesto «todo está en entredicho». La situación, según el secretario general del CGIE, Michele Schiavone, es «sorprendente» para los italianos en el extranjero, ya que «ya no estábamos acostumbrados a un olvido y a una desatención política tan grandes».
Schiavone se refirió a los recortes previstos para el mundo de los italianos en el extranjero por la nueva Ley de Presupuesto impulsada por el Gobierno de Giorgia Meloni, incluyendo sanciones para quienes viven en el extranjero y no están registrados en el AIRE y la lenta llegada de los nuevos empleados a las oficinas diplomáticas italianas en el exterior.
Y es precisamente por este «olvido» y esta preocupación que Schiavone explicó que el Comité de Presidencia ya se ha comprometido, en las próximas semanas, a celebrar varias citas con las que intentará «convocar a los Comites y a las asociaciones italianas en el mundo a iniciar debates y poner de nuevo en el centro de la discusión las políticas a favor de los italianos en el extranjero».
El evento de ayer en la tarde fue solo «la primera de varias citas con las que el CGIE ha comenzado a recorrer un camino que nos llevará a trabajar para representar las necesidades de nuestras comunidades en el mundo». Especialmente a la luz de estos «grandes recortes gubernamentales que tienen efectos perjudiciales para nuestras comunidades en el extranjero».
«El CGIE» —instó Schiavone— «es ahora llamado a promover ideas y propuestas, también en vista de las próximas citas electorales».
«Nuestra tarea es mantener las antenas en alto», destacó una vez más, «pero sobre todo debemos empezar ya a producir material para las reformas».
Volviendo a los «nefastos» recortes que sufre el mundo de la emigración, el secretario general explicó: «es un intento forzado de mantener a raya a los representantes, bloqueando sus posibilidades, quitándoles el oxígeno (es decir, el financiamiento) para realizar actividades e iniciativas. Y lo hacen en un momento en el que nuestras comunidades están creciendo desproporcionadamente».
Por este motivo, el compromiso del CGIE, aseguró Schiavone, es ahora «eliminar todos los obstáculos para que el Gobierno, más allá de los eslóganes, empiece a interesarse, después de 16 meses en el poder, por los italianos en el extranjero, que han sido demasiado penalizados hasta ahora».
También el secretario general adjunto del CGIE, Gianluca Lodetti, quien abrió el encuentro con la prensa tras el del Comité de Presidencia con Vignali, se dijo muy decepcionado por la aprobación de una ley de presupuesto que «también tiene cosas positivas», pero que «en conjunto no es aceptable con respecto a los capítulos que nos conciernen».
En términos políticos, Lodetti recordó el recorte a las escuelas en el extranjero y la reducción de los recursos para el CGIE, así como la reducción (o cancelación) de los incentivos fiscales para los «repatriados», es decir, los italianos que deciden regresar a Italia, y los nuevos controles sobre los trabajadores transfronterizos, en particular en Suiza.
«Hemos reconocido ante el ministerio y el gobierno el aumento del personal en el extranjero y esto es positivo» —explicó Lodetti— «pero en general no hemos encontrado una buena visión».
Durante la conversación con Vignali, también se tocó el tema del «endurecimiento de las sanciones para quienes no están inscritos en el A.I.R.E. y deberían estar». Este endurecimiento «es algo que tiene implicaciones importantes, tanto en las prestaciones asistenciales para quienes están en el extranjero como en su situación fiscal. Sin un plan coherente de información a los connacionales que involucre a todo el mundo de las asociaciones y de los patronatos, se corre el riesgo de que se cree un cortocircuito. Tenemos un impacto muy fuerte en este frente. Muchos connacionales están acudiendo a los consulados y a los patronatos porque quieren saber qué conviene hacer. Estamos en un momento de impacto muy difícil».
Y también a este respecto la opinión «no es positiva, porque el asunto tenía que haber sido discutido con antelación».
Por esto, en última instancia, «apreciamos el informe de Vignali, pero también estigmatizamos estos elementos. Y como CGIE expresamos nuestra oposición. Hay algunos elementos de luz, pero en general la opinión es negativa».
Finalmente, Silvana Mangione, subsecretaria del CGIE para los países de habla inglesa, se centró en algunas de las prioridades que surgieron durante la reunión del Comité de Presidencia, tres en particular: en primer lugar, la «necesidad de reiniciar la reforma de la ley que creó el CGIE».
Sobre este punto «ya nos hemos reunido dos veces» y estamos planeando enviar una «invitación a los Comites y a las asociaciones para proponer cambios a la primera propuesta de reforma que ya había llegado a la Cámara» y que tuvo que interrumpir su proceso político debido a las elecciones anticipadas.
El segundo punto que surgió, explicado nuevamente por Mangione, fue: «pensar en organizar la quinta reunión plenaria entre Gobierno, Regiones, Provincias Autónomas y CGIE». Una reunión fundamental «con el fin de trazar la línea política para los próximos 3 años», la última "se celebró en 2021. No pudimos dar seguimiento al documento final debido a las nuevas elecciones de los Comites y del CGIE».
El tercero y último punto en el que Mangione se centró es la falta de financiación al CGIE y a los Comites. «De hecho, con esta ley de presupuesto no podemos llevar a cabo las reuniones que el CGIE debe celebrar por ley. No se puede obligar a un organismo de esta importancia que representa a más de 6 millones de personas a dejar de funcionar. Esto paraliza el trabajo del CGIE, que no puede expresarse sólo a través de reuniones a distancia, porque nuestra tarea es dialogar con la Cámara, el Senado y el Gobierno. Y debe hacerse en torno a una mesa, ya sea en el parlamento o en un ministerio» (aise).
Imagen: Consejo General de los Italianos en el Extranjero
Non e’ una novita’ quello che sta succedendo.
I milioni di Italiani all’estero sono una specie ormai “aliena” per qualunque Governo. (non importa di Destra o Sinistra).
Nesuuno sa come occupare bene la “trippa per gatti” magari dicendo che non c’e’ abbastanza Trippa. Ma non e’ vero.
Siamo abbandonati come su un lontano asteroide, e nonostante quello che oggettivamente qui’ facciamo anche per la nostra “Amata italia”.
Ma “verra’ un giorno…”.
Dr. Lorenzo Borselli