11:30 hrs. - El Camino de Santiago de Compostela, en España, ha sido y sigue siendo una de las rutas de senderismo más populares y celebradas del planeta. El gran éxito alcanzado por la promoción realizada con motivo del año jubilar de 1993 —con la llegada de casi 100 mil peregrinos— hizo conocer al público en general el moderno itinerario. Las infraestructuras de apoyo creadas, la disponibilidad de información y la facilidad para obtenerla difundieron el interés por realizar la peregrinación jacobea. Gracias a ello, el número de personas que pasan por este trayecto cada año no ha dejado de aumentar.
No todos saben, sin embargo, que Italia cuenta con una ruta análoga y que México está preparando su propia oferta en este campo.
La Vía Francígena en Italia
La Vía Francígena forma parte de un conjunto de rutas que iban desde Europa occidental hasta Roma, continuando luego hacia los puertos de embarque en Apulia hacia Tierra Santa, destino de peregrinos y cruzados.
En 1994 fue declarada Ruta Cultural Europea, asumiendo, al igual que el Camino de Santiago, una dignidad supranacional.
El recorrido nació en el siglo VI por una necesidad estratégica de las poblaciones longobardas que necesitaban conectar su ciudad principal, Pavía, con los ducados del centro-sur de Spoleto y Benevento, semirodeados por territorios bizantinos. La necesidad de utilizar una vía suficientemente segura llevó a la elección de un itinerario hasta entonces considerado menor, que cruzaba los Apeninos por el actual paso de Cisa y, tras el valle de Magra, se alejaba de la costa en dirección a Lucca.
A partir de finales del siglo VIII, tras el descenso de Carlomagno a Italia después del llamamiento del Papa Adriano I y la anexión del norte de Italia al Reino de los Francos en 774, la ruta pasó a ser conocida como Vía Francígena, o “camino con origen en Francia” y, en una primera fase, se empezó a identificar su destino final con Roma, sede del papado.
La primera certificación de la Vía Francígena al sur de Roma se remonta al año 1024, con el Privilegium Baiulorum Imperialium encontrado en Troia di Puglia, en la Vía Trajana.
Hay más de tres mil kilómetros de Vía Francígena desde Canterbury hasta Roma y hacia Santa Maria di Leuca, en el extremo sur de Apulia. Una conexión que une la Europa de los pueblos y las culturas, tocando 5 países, 16 regiones y más de 600 municipios.
La ruta atraviesa Kent en el Reino Unido, las regiones de Haute-de-France, Grand Est e Bourgogne-Franche-Comté en Francia, los cantones de Vaud y Valais en Suiza y las regiones del Valle de Aosta, Piamonte, Lombardía, Emilia-Romaña, Liguria, Toscana, Lacio, Campania, Basílicata, Apulia y el Estado del Vaticano en la península italiana.
Se caracteriza por caminos de montaña, empedrados, senderos rurales y vías secundarias, sin tráfico, por terracerías entre cipreses o a la sombra de solemnes pinos domésticos. Los pies de los viajeros pisan las carreteras más antiguas de Europa con señales que los guían en el camino. El recorrido oficial de la Vía Francígena, practicable a pie, en bicicleta y parcialmente a caballo, es seguro, fácil, libre de dificultades técnicas y cuidadosamente diseñado para ser accesible a todos y a todas las edades.
El Camino Iniciático de Santiago en México
El pasado viernes 12 de abril la secretaria de Turismo del Estado mexicano de Querétaro, Adriana Vázquez, presentó los avances del Camino Iniciático de Santiago, un recorrido de 127 kilómetros en una de las regiones del país con más variedad de atractivos para practicar ecoturismo y turismo deportivo.
La ruta —cuyo nombre se inspira en la denominación original de la capital del Estado en el que se encuentra, Santiago de Querétaro— atraviesa cuatro municipios de la Sierra Gorda —Pinal de Amoles, Landa de Matamoros, Arroyo Seco y Jalpan de Serra— y se dividirá en seis etapas, cada una de entre 16 y 28 kilómetros, permitiendo a los viajeros sumergirse en la riqueza cultural y natural de la región.
A lo largo del trayecto, los viajeros tendrán la oportunidad de descubrir la biodiversidad y los microclimas que caracterizan este territorio, así como de visitar las Misiones Franciscanas de la zona, declaradas Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 2003.
De igual manera, tendrán acceso a una zona arqueológica, cinco museos, siete recintos religiosos y podrán disfrutar de las cascadas, manantiales y presas que adornan el camino.
Foto: challengeinternacional.com