02:40 hrs. - Una historia italiana interpretada por un mexicano ganó el Oscar a la mejor película de animación. Pinocho de Guillermo del Toro —dirigida por el director tapatío junto a Mark Gustafson— fue galardonada con la primera estatuilla de la velada hace unas horas durante la entrega de los premios de la Academia en el teatro Dolby de Los Ángeles.

Realizada con la técnica stop-motion, la película está basada en la novela de Carlo Collodi Le avventure di Pinocchio. Storia di un burattino, aunque ambientada en la era fascista.

«La historia de Collodi está llena de mensajes políticos», dijo del Toro a la revista estadounidense Entertainment Weekly. «Sirvió» —añadió— «a las necesidades de Italia en ese momento. Fue una idea fundacional tratar de abrazar la obediencia y el amor paterno en un contexto donde la sociedad se estaba fusionando con un nuevo Estado, creando un sentido de orgullo con respecto al país y a la familia. En su carácter político, la idea central del relato era la exaltación de la obediencia como virtud. Pero, si queremos elevar la desobediencia a la categoría de virtud, el mejor telón de fondo será un período totalitario. Y, además, si el objetivo es contar historias de padres e hijos —Geppetto y Pinocho, Spazzatura y Volpe, el oficial fascista y su hijo, José y Jesús— entonces la forma más cáustica y corrosiva de la figura paterna es la idea fascista del hombre fuerte, Mussolini».

Importantes actores dieron voz a los personajes animados en la versión original del largometraje: Ron Perlman, Tilda Swinton, Ewan McGregor, Christoph Waltz, David Bradley, Gregory Mann, Cate Blanchett, Tim Blake Nelson, Finn Wolfhard, John Turturro y Burn Gormán. La película es distribuida por Netflix.

«La animación es el cine, no es un género. Es importante pasar al siguiente nivel. Mantengan viva la animación en sus conversaciones. Agradezco a Netflix por apoyarnos y dedico el premio a mi esposa Kim, a mis hijos y a mis padres que ya no están», dijo el director al recibir el Oscar.