17:19 hrs. - Puntodincontro entrevistó a Rosanna Bonasia, recientemente elegida presidente para los próximos dos años de la Asociación de Investigadores Italianos en México (ARIM).
Rosanna, ¿podrías contarnos acerca de tu trayectoria profesional?
Soy geóloga de formación e hice un doctorado en Ciencias de la Tierra en la Universidad de Bari, después de lo cual comencé a especializarme en temas de mecánica de fluidos porque, siendo vulcanóloga y trabajando en ese momento en temas de dispersión de cenizas en la atmósfera, era un tema que me interesaba mucho.
Una vez completado el doctorado, fui a estudiar una Maestría de nivel II en termodinámica de fluidos en la Facultad de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Roma Tor Vergata, antes de comenzar el posdoctorado en Nápoles en el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, donde estuve dos años. Fue una experiencia laboral muy importante, pero en 2010 —un período crítico para los contratos a tiempo indefinido en Italia— comencé a buscar oportunidades.
Solicité ser admitida a un programa de posdoctorado en Querétaro, donde llegué al Centro de Geociencias de la UNAM. Posteriormente, con una cátedra del Conacyt, me trasladé al Instituto Politécnico Nacional en la Ciudad de México, donde estuve ocho años trabajando en temas relacionados con los riesgos de inundación y los daños que puede causar el impacto entre fluidos y estructuras. El 1 de marzo del presente año firmé un contrato como profesora de Ingeniería Civil y Tecnologías Sustentables en el Campus Estado de México del Tec de Monterrey.
¿Cuántos son los miembros de la Asociación de Investigadores Italianos en México?
Hay poco más de 30. Yo soy una de los socios fundadores y en 2017 participé en la redacción del Estatuto junto con otros colegas. En el momento de la primera junta directiva yo era vicepresidente, luego me alejé un poco por la pandemia y me fui a Italia a tomarme un año sabático en 2021. Siempre ha habido alrededor de 50 miembros registrados, pero ahora han disminuido y la mayoría de los actuales están capacitados en humanidades. Se ha perdido un poco el contacto con investigadores especialistas en ciencias matemáticas, físicas y naturales y quiero intentar que vuelvan a involucrarse.
Pero los investigadores italianos en México son muchos, ¿verdad?
Emilia Giorgetti (agregada científica de la Embajada de Italia en México hasta enero de 2023, nota del redactor) hizo un trabajo excepcional para localizar a los investigadores italianos en este país, que suman más de 140. La primera vez que ella me contactó, yo no tenía absolutamente idea de que éramos tantos. Creo que hoy en día todos conocen la existencia de la ARIM, pero creo que el objetivo de la organización no está muy claro, por lo que probablemente se necesite una comunicación más intensa y precisa para volver a involucrarlos.
En el programa de la nueva junta directiva hemos incluido la difusión de proyectos que se pueden emprender junto con Italia. No todo el mundo, por ejemplo, sabe que existen iniciativas de colaboración entre el Consiglio Nazionale delle Ricerche de Italia y el Conacyt de México, ni cuáles son los métodos y requisitos para participar en ellas. Son programas muy interesantes, que permiten fortalecer la colaboración con Italia que muchos de nuestros investigadores en México han abandonado. Por eso, en primer lugar la ARIM quiere dar un mayor servicio de información y también dar a conocer en Italia los proyectos en los que están involucrados los investigadores en tierra azteca, así como sus competencias. Este intercambio de datos podría dar lugar a una relación más intensa en el ámbito de la consultoría y la colaboración con empresas e instituciones académicas.
¿Cuánto afecta la ausencia de un agregado científico en la Embajada de Italia a la realización de las actividades de la ARIM?
En este periodo transitorio estaremos un tiempo sin agregado científico, por lo que tendremos que buscar nuevas vías de contacto con la Embajada. El Embajador De Chiara es una persona interesada en el campo científico y esperamos poder organizar eventos y reuniones para continuar en la ruta trazada por Emilia Giorgetti.
