11:50 hrs. - El 4 de noviembre de 1966 Florencia, su población, sus edificios y sus obras de arte fueron azotados por el agua y el lodo tras el desborde del río Arno.
La desastrosa inundación envolvió la ciudad, causando decenas de víctimas y dañando y poniendo en peligro obras de arte y edificios históricos. Pero las imágenes y materiales audiovisuales que fueron publicados en periódicos y difundidos por los medios de comunicación de la época también cuentan una realidad paralela a la devastación, en la que miles de voluntarios de todo el mundo llegaron a la capital toscana para ayudar en el rescate y conservación de personas y patrimonio.
Esos jóvenes fueron llamados los ángeles del lodo y demostraron que la sociedad puede organizarse solidariamente, como sucedió después también con los terremotos en Friuli (1976) y en Irpinia (1980). Fueron precisamente esas movilizaciones sociales las que evidenciaron ante los políticos la necesidad de estructurar un Sistema Nacional de Protección Civil, que se convirtió en realidad en 1982.
El sistema está estructurado regionalmente y utiliza mecanismos de intervención en todas las oficinas con funciones operativas centrales que dependen del Cuerpo Nacional de Bomberos.
El Sistema Nacional de Protección Civil fue posteriormente reformado con nuevas iniciativas legislativas y hoy representa una de las excelencias de Italia como país.
Italia y México comparten una alta sensibilidad al impacto de los fenómenos naturales y —en el contexto de la colaboración industrial y el intercambio de experiencias y tecnologías entre los dos países—existen acuerdos en vigor que involucran a sus respectivos departamentos nacionales de protección civil.
Tra le iniziative congiunte realizzate risaltano un seminario/workshop sulla mitigazione degli effetti dei disastri naturali nel 2018 e una missione di esperti messicani in Italia nel 2019, in collaborazione con i Vigili del fuoco. Recentemente —dopo due anni di sospensione delle attività a causa della pandemia di Covid— nel luglio 2022 si è svolto presso il CENAPRED un congresso con la partecipazione da parte italiana del Corpo Nazionale dei Vigili del Fuoco, dell’Istituto Nazionale di Oceanografia e Geofisica Sperimentale (OGS) e di aziende private, nonché di squadre specializzate di ricerca e soccorso urbano (USAR) dei due Paesi.
México ha desarrollado a lo largo de los años un sistema de protección civil que abarca las tres esferas del gobierno territorial, a nivel municipal, estatal y federal.
Los esfuerzos que deberá afrontar esta nación latinoamericana, a corto y mediano plazo, son cuantiosos y en este contexto las tecnologías italianas aplicadas a la prevención de riesgos sísmicos y las soluciones relativas a la prevención y manejo de fenómenos naturales sugieren interesantes áreas de colaboración con instituciones y empresas del país de la bota.
Sobre la base de las experiencias adquiridas, el ICE —en estrecha colaboración con entidades mexicanas— ha estructurado un programa específico destinado a involucrar a corporaciones e instituciones italianas y locales que operan en el sector en:
1) Manejo de emergencias dentro de estructuras afectadas y riesgos urbanos actuales
2) Uso de técnicas y tecnologías relacionadas con las metodologías USAR en Italia
3) Tecnologías para operaciones de búsqueda y rescate en estructuras colapsadas
4) Organización y administración tecnológica de los centros de mando y control
5) Tecnologías para el control de incendios
6) Tecnologías para el seguimiento de fenómenos naturales y alerta temprana a la población civil
7) Metodologías y tecnologías para preparar a la población civil para el manejo de emergencias, incluyendo el uso del metaverso y la realidad virtual
8) Monitoreo de deslizamientos, aludes y avalanchas
En este contexto, destaca la colaboración entre el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y varias universidades italianas para la restauración de algunos conventos mexicanos dañados por los terremotos de 2017, así como el uso del sistema satelital Copernicus durante varias emergencias.
Durante el seminario que se llevó a cabo en julio se planteó la posibilidad de utilizar una metodología innovadora de especial interés para la capacityación de la población en el ámbito de la protección civil: el uso de juegos y de la realidad virtual. En este contexto podemos citar, por ejemplo, el desarrollo en el metaverso de escenarios catastróficos en los que la población interactúa con los equipos de rescate, aprendiendo a no estorbar involuntariamente, muchas veces impulsados por el sincero deseo de ayudar, rescatar y organizarse en actividades de apoyo y soporte.
Otro frente en el que Italia tiene mucho que ofrecer es el uso de la inteligencia artificial en los sistemas de prevención, seguimiento y resolución de emergencias, así como el uso de redes de comunicación innovadoras para garantizar la seguridad de las infraestructuras críticas y la coordinación de operaciones urgentes.
En los próximos meses, el ICE seguirá difundiendo tecnologías italianas para este sector y organizando encuentros que permitan el intercambio de experiencias, propuestas y soluciones en el manejo de emergencias.
Este artículo de Giovanni Luca Atena fue publicado en sitio Mexico Business News el 26 de septiembre de 2022